El pasado 3 de Marzo de 2020, tuvo lugar en la Universidad Camilo José Cela una conferencia sobre la Intervención científica y tecnológica del hundimiento del «Prestige». El evento formó parte del ciclo de conferencias del la Academia y fue impartida por el rector de la Universidad Emilio Lora- Tamayo.
La conferencia que impartió el Dr. Emilio Lora-Tamayo el pasado día 4 de marzo se centró en la presentación del papel jugado por el Comité Científico Asesor (CCA) constituido el 9 de diciembre de 2002 para remediar las consecuencias del naufragio del Prestige.
El petrolero Prestige, que iba cargado con algo más de 75.000 Tm de fuel tipo M-100, se hundió el 19 de noviembre (20 días antes) a 30 millas al NO de la costa de Finisterre, una vez que se partió en dos, perdiendo parte de su carga en ese momento. Se originó así un pecio de proa y uno de popa que reposaron finalmente a unos 4 Kms. de profundidad y 3 Kms. de separación una vez que llegaron al fondo del mar. El fuerte choque causó más de una veintena de grietas y fugas por el que se escapaba el fuel a razón de 125 Tm diarias, asegurando así la alimentación por mucho tiempo de la contaminación del mar y de las costas con una marea negra que alcanzó distintos puntos de la costa gallega e incluso algunos del País Vasco y Portugal.
La comisión, constituida por 19 investigadores y tecnólogos y operando bajo los criterios de excelencia, independencia y transparencia, asumió inmediatamente el reto de diseñar, desarrollar y gestionar una campaña de obturación de las fugas al máximo posible, empleando cualquier medio y utilizando remedios de aplicación rápida, aunque provisional. Para ello utilizó el submarino experimental Nautile, con capacidad de llegar a más de 4 Kms de profundidad y realizar algunas manipulaciones por medio de dos brazos robóticos.
Esa misión constituyó la primera fase de la neutralización del vertido continuo, en la que a su término, mes y medio más tarde, llegó a estimar que con esa obturación provisional se habían reducido las fugas hasta un caudal del orden de 2 Tm diarias. En paralelo el CCA trabajó para valorar distintas soluciones de neutralización definitiva y proponer las que le parecieran más factibles.
Esa etapa constituyó la segunda Fase que terminó el 14 de febrero de 2003, con un informe al Gobierno en el que se proponía la extracción del fuel por paquetes (batch) utilizando ROVs (Remote Operated Vvehicles) especialmente acondicionados para llegar a esas profundidades y proponiendo asimismo que en caso de no poder desarrollarse la solución propuesta se optara por realizar el “sarcofagado” de ambos pecios.
Asimismo se proponía que la operación, con su correspondiente ingeniería, fuera desarrollada, no por el CCA, sino por una empresa de las que tenían experiencia en perforaciones petrolíferas off shore, lo que se inició en la segunda mitad de ese mes de febrero y termino a finales de ese año 2003.
En esa fecha del 14 de febrero el CCA se autodisolvió, no sin antes y en paralelo con ambas fases, desarrollar el siguiente programa de análisis e investigación a corto plazo sobre los siguientes temas relacionados con la valoración de las condiciones de los pecios y sus vertidos:
Asimismo, al final de su intervención, el CCA recomendó la convocatoria de un programa de intervención científica o PIC, que ampliara los primeros estudios realizados, mediante una serie de proyectos de investigación de larga duración que abordaran los siguientes temas relacionados con las consecuencias a medio y largo plazo del vertido